domingo, 12 de octubre de 2014

Ensayo sobre la realidad regional

Hablando después de los resultados que su obtuvieron en los comicios electorales pasados el día 5 de octubre hay discordia y una anarquía en la población de talavera como muchos disconformes en la voluntad del pueblo se hace notar que lo aguerrido de los chancas se obtuvo y se mantiene desde los tiempos antes de los incas ya que nuestro pueblo en general Apurímac se mantiene muy salvaje a los resultados que no satisfacen sus expectativas tanto que en este ámbito las huelgas en esta región son comunes impulsadas por grupos con un fin lucrativo y no por la voluntad del pueblo como también la envidia empuja a estos pueblos de la región a confrontarse y a ser más hostiles como es el caso de Abancay y Andahuaylas como es el ejemplo de la construcción del hospital de Andahuaylas y para ello se ha llevado una gran cruzada para no poder invertir más fondos a una obra pública que beneficiaría a toda una población pero como el odio es grande se nota que ni uno deja de comer ni otro come como el perro del hortelano. En este contexto no existe la comunicación entre pueblo ya que estos se odian acérrimamente con el fanatismo puesto en sus cienes, más que ello solo trae perjudicar al pueblo hermano y no al progreso de la región que es eso que se quiere que Andahuaylas y toda la región de Apurímac deje  de ser un pueblo pobre como lo muestra las cifras del INEI.
Con la creciente fuerza e impulso económico que hace crecer a los pueblos para su mejora Andahuaylas ha sufrido y viene experimentando una gran expansión por lo cual su economía se centraliza en su capital lo mismo pasa en muchos pueblos de la región apurimeña por lo cual el crecimiento es desmedido y no es repartido justamente con los que menos tienen ya que hay personas y comunidades que aún viven en cuevas y los programas sociales solo ocultan un poco lo que hay de pobreza en toda la región. Con un crecimiento económico desmedido también bien lo que es la inseguridad y no hay políticas o medidas para combatirla mal que se viene aproximando no solo con el robo en las carreteras a los bus interprovinciales sino en las casas y en las calles, lamentablemente en la región no se han tomado políticas para combatir este mal como ya lo han hecho en lima almenos dar un paso.
También hay que ver que en la región no se toma mucha importancia la ecología y la belleza eco logística dela región como es en el caso de Andahuaylas teniendo a un rio como el desaguadero de la ciudad más contaminado por su gente que no tiene ni la más mínima conciencia para tomar acciones y ver un rio bien conservado y dar más belleza paisajística que también llama la atención de los turistas y de los que no son de aquí, lamentablemente como este ejemplo solo damos una mala imagen a la región y no solo al pueblo de Andahuaylas que se despreocupa de su propia ecología, como también lo vemos en los basurales que deja la feria más grande a nivel nacional como es la feria dominical, ahí hasta ahora no se han tomado medidas para detener este mal, lo peor de todo es que cada ciudadano también es quien está apoyando a la destrucción del ecosistema de la ciudad y contribuyendo a la destrucción no solo de la belleza paisajística o del ecosistema sino también de la salud pública.
Hay que tener en cuenta que esta región está más dividida por muchas diferencias las cuales uno no deja crecer al otro por simple envidia a que la otra ciudad tenga mayores servicios por lo cual lleva a la mala coexistencia de los pueblos y a la mala comunicación de ellos mismos, con ello llegamos a la mala coexistencia de los pueblos y del desarrollo que no sería sostenible sino una cruel competencia de ambos por lo cual se lleva a la autodestrucción y no a una coexistencia que lleve en vías de paz y de desarrollo.
Lo curioso de ser apurimeño es que a pesar de ser una región amigable entre autoridades y pueblos hay rencor por dejar atrás pero que llevamos en el alma para que otro no esté mejor posicionado que el otro por ello es que el arribismo perdura en esta región por lo cual es un mal que debamos erradicar.

El Perú crece y también lo deberían hacer las regiones pero en nuestro caso las diferencias nos han hecho enemigos de los demás que en si solo nos llevan al fracaso y a la pobreza, una cuna de subdesarrollo.

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