Adquisición corrompida

Los casos mencionados en el capitulo anterior tienen en peculiar algo, los valores corrompidos, que son alterados en la infancia en pleno proceso de adquisición.

Los primeros modelos de persona que ve un niño es a su papa, mama o al que este cargo de esa criaturita, el niño va estar siempre observando como el padre se comporta en frente de los demás, como actúa a determinados casos, y así el va moldeando y adquiriendo valores, que no siempre pueden ser buenos.

Como había dicho en el PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA los valores son adquisitivos y estos rigen en la persona por el resto de su vida, pero no mencione que necesariamente deban ser buenos, también los pueden ser malos para la sociedad, ya que la persona los adquirió y desde su punto de vista es bueno.

Un ejemplo es el de un ladrón que roba por necesidad, el lo ve bueno porque le permite estar con vida, además el robar como valor le fue enseñado desde niño por sus padres, que las calles de la ciudad moldearon a nuestro "piraña".

Es desde la infancia donde vemos como se va moldeando los valores, que dependiendo en el medio en donde uno viva, que clase de educación reciba, y el criterio que tiene la persona, se irá moldeando nuestros valores.

 Yendo al caso de provincia, las personas en la sierra tienen una educación autoritaria, en donde el modelo a seguir es el de los mayores, es autoritaria porque se hace a la fuerza y a punta de latigazos, no hay opiniones en contra. Y con esa educación radical que reciben, los niños de la sierra (esencialmente) se tornan agresivos y radicales en las tomas de decisiones en contra de un delito, por eso hay menos ladrones en la sierra, por el miedo que está presente en una muerte segura si vas en contra de los principios de los pobladores. Yo no recomiendo para nada que den esta educación, vuelven a un niño introvertido y con serios problemas de sociabilidad.

En los casos de la costa, los autores del crimen del hincha Orayce, son criados con gran libertad, sin rigor ni autoritarismo de los padres, pero con falta de responsabilidad, muchas veces no son dirigidos ni regidos por sus progenitores, el niño tiende a tomar a cualquier modelo a seguir, sin discernir que el modelo a que sigue es el peor ejemplo. A falta de comunicación en la casa y la vida ajetreada en la capital nos llenamos de estrés y se hace colectivo, aun peor cuando los problemas que ya íbamos acumulando ya empezó su proceso de putrefacción, y enferma a todos; los niños(as) de la costa no tienen el acercamiento con sus padres, y están más propensos a caer en peligros. En la sierra también pero es muy poco ya que ahí la sociedad no es tan corrompida como en la costa.

Como ven, uno está sujeto al autoritarismo de los padres, el otro pese a su gran libertad se encuentra prisionero de la locura. Ambas no son buenas opciones para criar a un hijo, ambas tienden a volver al niño (ña) a la locura. La adecuada preparación de los padres, tanto física, mental y económica serian un buen punto de partida, pero la base que deberían poner toda persona, son los valores, como son la responsabilidad, honestidad, honradez, etc. Pero a diario no vemos que se practica ningún valor, como por ejemplo las personas que no botan su basura en un tacho de basura, y las dejan ahí arrojas por la calle, no respetan el semáforo, no ceden el asiento  las personas mayores de edad, son mas impuntuales, y eso se ve en los colegios nacionales y hasta en las academias preuniversitarias. Y así como quieren que un niño aprenda a comportarse como ciudadano, si nosotros mismos los corrompemos con nuestras acciones, son pocos los niños que se dan cuenta que lo que hacen sus padres es lo incorrecto y deciden ir en contra de ello, pero es una lástima que luches en contra de la corriente; lo que hace el 90% es seguir la corriente, y el 10% va en contra, díganme quien desplaza a quien. Pues obviamente que la corriente, pero si hay algo que puede cambiar el curso de las masas, y es dando el ejemplo, aunque usted no lo crea, si uno comienza a levantarse en contra de lo mala que ve cada día y decide darle guerra, pronto conseguirá partidarios y colegas que fielmente lo seguirán, pero esto solo dependerá de cómo sea el líder, que actitud tome en frente de las adversidades, de qué manera encarara los problemas y como este preparado para lo peor, ahí se le vera la madera que tiene, para luchar en contra de la corriente, serán como rocas que apoyadas en una firme base desviaran el rio de lo malo hacia otro lado y no arrasaran con la nación.

Siguiendo con el tema, la mala crianza de los que asesinaron a Orayce, es evidente que tenían ya una infancia corrompida y sin ninguna base en valores morales o ciudadanos, sus valores son vasados en lo que la sociedad en la que Vivian es corrupta, infame y sin esperanza de cambio, solo seguir la corriente para al menos estar vivos.

Ahora en el caso de la señora que mato a su hija, también su infancia está marcada por el maltrato en su infancia, y ese odio que tenia a la madre y en especial al esposo, lo descargaba en la niña, es evidente que no adquirió ningún valor que respete a la vida.

Juan Jacobo Rousseau dijo en su obra "Emilio":        

• "El hombre es naturalmente bueno, es la sociedad que lo corrompe."

El rol de padres que desempeñan en cada hogar, es agotador y es una gran responsabilidad que con los problemas y la falta de interés de cada día, trae consigo una generación peor que la de antes; la universidad católica a mi generación la lama incógnita, no se sabe si es para bien o mal país. Ya que no perseguimos un mismo ideal, cada uno persigue cosas distintas y va por su lado, haciéndose una persona mecanista que trabaja solo para subsistir y trae hijos sin ninguna planificación familiar, hasta ellos no saben cómo nació. Entonces ahí se sigue dando más el círculo vicioso letal.

Las pequeñas cosas que hagamos, sea cruzar en medio de la calle sin usar al menos el puente peatonal, alguien nos está observando, y ese es un niño, un adolescente, un escolar que ve en nosotros un modelo a seguir, somos el ejemplo que damos a la futura generación, así que toma las responsabilidades de tus actos, porque predicamos con el ejemplo.